La impresión como forma de atraer a los clientes en la nueva normalidad

Aunque, como señala el informe “Generación de valor para los clientes” de Canon, el 95% de los compradores de comunicaciones ha trasladado el gasto a los soportes digitales, otras investigaciones también han demostrado que cada vez es más difícil comercializar con eficacia en canales de medios digitales y parece ser una cuestión de confianza. La consultora de comunicación Kantar ha informado de que la publicidad en páginas web, y especialmente a través de redes sociales, fue el medio de menor confianza para los responsables de marketing, y que el más fiable fue la impresión.

Aunque la impresión puede representar una inversión inicial más alta, es más probable que se lean las comunicaciones impresas y que se confíe en ellas, lo que hace que su retorno de la inversión sea superior al de las estrategias digitales.

Por otra parte, la calidad es algo que realmente importa. La creación de comunicaciones impresas de alta calidad añade valor al mantener la relevancia y el atractivo de los mensajes, mejorando así la experiencia del cliente. La ejecución de estas campañas en la propia empresa también ofrece un mayor control sobre la personalización. Gracias al poder de la tecnología de dato variable, las impresoras digitales y el software permiten a los usuarios producir tiradas cortas de materiales individualizados e increíblemente personalizados. Aplicaciones como catálogos, invitaciones y materiales de marketing pueden dirigirse a clientes específicos, personalizados con sus nombres y otra información.

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