La tecnología de impresión como facilitadora del negocio
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La tecnología debería facilitar y permitir el trabajo, no ser un impedimento. Pero lo cierto es los trabajadores pierden una media de 46 minutos al día por culpa de una tecnología lenta. Dispositivos como impresoras y multifuncionales deben facilitar una conectividad eficiente entre todos, estén donde estén, sin procesos complicados o resultados poco fiables.
Desde la llegada de las tecnologías digitales, la velocidad de trabajo ha aumentado enormemente. Pero a veces la tecnología genera sus propios errores e ineficiencias. Según una nueva investigación, los trabajadores pierden una media de 46 minutos al día por culpa de una tecnología lenta, y uno de cada cinco empleados admite que la tecnología lenta hace que pierda la concentración.
La tecnología debería pues facilitar y permitir el trabajo, no ser un impedimento. Esto es incluso más crucial en los espacios de trabajo actuales, en los que las organizaciones deciden cada vez más adoptar modelos de trabajo híbridos. Estas nuevas formas de trabajar cambian la forma en que los empleados interactúan con los sistemas de oficina y, a su vez, en lo que tienen que centrarse las empresas a la hora de invertir.
Si las empresas funcionan con un modelo de trabajo en el que los empleados trabajan principalmente desde casa, es probable que un miembro de la plantilla vaya a la oficina cuando tenga que realizar una tarea que no puede completar desde casa. Por eso, es importante que la tecnología que haya en la oficina permita a los empleados completar estas tareas con la mayor eficacia posible, para que su tiempo en la oficina sea productivo.
Para que el modelo de trabajo híbrido, en el que alguna gente está en la oficina y otra en casa, funcione de forma eficiente, los dispositivos tecnológicos como las impresoras y multifuncionales deben facilitar una conectividad eficiente entre todos, estén donde estén, sin procesos complicados o resultados poco fiables.
Por otra parte, la tecnología debe ser fiable y evitar problemas técnicos difíciles de resolver que puedan generar tiempo de inactividad. Con esto en mente, las organizaciones pueden plantearse la inversión en menos dispositivos, pero más avanzados, que ofrezcan una productividad y fiabilidad mejoradas para reducir la cantidad de tiempo que pasan los operadores utilizándolos y aumentar el tiempo que pasan en funciones que impulsan la productividad, como la conversión de documentos impresos en información digital disponible para todos.
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