La impresión sigue siendo importante para los empleados remotos

Una nueva investigación realizada por Keypoint Intelligence muestra que el 45% de los nuevos trabajadores en el hogar han adquirido un nuevo dispositivo de impresión. La investigación desglosa las personas que compraron el dispositivo de su bolsillo y las que recibieron directamente de su empresa. Y aproximadamente el 57% de los individuos pagaron su propia tinta o tóner, adquiriéndolos ellos mismos o como parte de un plan de reabastecimiento automático. Cuando la compañía cubre el coste, en algunos casos, el trabajador paga por adelantado o al menos inicia un plan de reabastecimiento automático. Otra opción es que la compañía paga el coste bajo un plan de reabastecimiento.

Alrededor del 71% de los trabajadores remotos que pagan por los suministros dicen que imprimirían más por trabajo si el empresario cubriera este coste. La encuesta sugiere que las personas que reciben una impresora de su empresa tienen más probabilidades de mantener los niveles de impresión previos a trabajar desde casa.

Estos hallazgos ciertamente tienen implicaciones para los proveedores de impresión. Si pueden animar a los clientes empresariales a equipar a sus teletrabajadores con nuevos dispositivos, parece que sus hábitos de impresión podrían mantenerse estables. No es demasiado tarde para que estos proveedores piensen en estrategias para vender impresoras de trabajo desde entornos domésticos. De hecho, la investigación revela que el 58% de los encuestados desean seguir trabajando desde casa una vez que la amenaza COVID-19 haya pasado (al menos parte del tiempo) y el 80% piensan que su trabajo les permitirá hacerlo.

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