La pandemia impulsa la transición hacia la impresión comercial digital
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El COVID-19 está afectando a empresas e industrias de manera diferente. En la industria de la impresión, hemos visto un aumento de la impresión de packaging, pero ¿qué pasa con la impresión comercial? ¿La pandemia está acelerando la muerte de la impresión offset y una transición más rápida a la impresión digital?
En la situación actual, tiene sentido que las marcas necesiten ser más efectivas al comunicarse con clientes y colegas. En este sentido, la impresión digital es más adecuada que la offset para la personalización. La mayoría de los especialistas en marketing también han tenido presupuestos más ajustados durante esta crisis, lo que les ha obligado a decidir entre el marketing masivo para llegar al mayor número de clientes o utilizar un marketing más dirigido para aumentar la probabilidad de conversión. Las empresas de impresión digital estarían en este último.
Todavía existe la esperanza de que los proveedores de servicios de impresión digital puedan convencer a las marcas del valor de las comunicaciones dirigidas, pero, al mismo tiempo, existe el riesgo de que muchos especialistas en marketing sigan su tendencia tradicional de campañas masivas para involucrar a tantos consumidores como sea posible. La buena noticia es que, aunque no está claro que la impresión offset terminará en un futuro próximo (como algunos podrían haber predicho), existe una gran posibilidad de que esta crisis favorezca lo digital en algunas áreas. Como señala Keypoint Intelligence, los presupuestos de impresión no han desaparecido y la impresión digital admite una comunicación más holística y efectiva debido a tiradas más cortas (más específicas) e impresión de datos variables (más relevantes).
Volviendo a la predicción de que se acerca el final de la impresión offset debido al coronavirus, centrémonos en el mercado de compras online. La pandemia está acelerando la tendencia de las compras online y la impresión no es una excepción. Se espera que esta tendencia favorezca la impresión offset más que a la digital, a medida que los grandes impresores online con prensas B1 están automatizando miles de trabajos de tiradas cortas todos los días a un coste muy bajo.
La verdad es que, para que la impresión offset deje de funcionar, todas las tiradas (a menos que los proveedores de impresión digital puedan acercarse a los costes de funcionamiento de la impresión offset) tendrán que rondar menos de 10.000 páginas A4 y las que no lo sean tendrán que ser 100% personalizadas. Hasta este punto, Keypoint Intelligence estima que la impresión digital solo tendría una tasa de crecimiento compuesta anual del 2,5% durante los próximos años. Si el offset terminara, el crecimiento sería mucho más alto, ya que la tecnología digital capturará una gran parte de esos volúmenes de impresión.
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