Problemas de adquirir por tu cuenta una impresora para teletrabajar
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Aunque el 42% ha renovado su impresora desde la pandemia, es muy probable que estas compras no estén autorizadas y que las impresoras no cumplan con las pautas de seguridad corporativas. La mayoría de los trabajadores reconocen que les faltan las funcionalidades de la impresora de oficina.
De acuerdo con el informe Home Printing Trends 2021 de Quocirca, el 86% de los trabajadores a domicilio tiene una impresora en casa y el 54% afirma tenerla antes de la crisis del COVID-19, mientras que el 42% han realizado actualizaciones en su impresora. Tan sólo un 10% indica que su jefe les ha proporcionado una impresora, mientras que el 38% de los que tienen impresoras caseras afirman que han cubierto los costes de impresión ellos mismos. El 40% dice que pueden reclamar algunos o todos los gastos de consumibles, y solo el 17% informa que su jefe le ha proporcionado una impresora para fines laborales.
Lo que este estudio pone de manifiestos es que una amplia mayoría de trabajadores compra de impresoras sin el conocimiento de las empresas, lo que está creando vulnerabilidades de seguridad. Si bien algunos empleados parecen ser conscientes de los posibles riesgos de seguridad asociados con la impresión doméstica, muchos no lo son. Solo el 51% están preocupados por la seguridad cuando usan su impresora doméstica.
Más preocupante es el hecho de que solo el 46% de los empresarios están capacitando a sus empleados sobre los riesgos potenciales y cómo mantener el cumplimiento de la protección de datos, y el 34% está monitorizando documentos o proporcionando pautas sobre la eliminación de documentos confidenciales. Esta brecha y la falta de concienciación dejan una puerta abierta a posibles amenazas a la seguridad, lo que es particularmente preocupante dado que el trabajo en el hogar se mantendrá para muchas organizaciones.
Por otra parte, la mayoría de los teletrabajadores reconocen que les faltan las funcionalidades de la impresora de oficina. Lo que más echan de menos son la velocidad de impresión (57%), el no ser responsables del mantenimiento (47%) y el poder imprimir gratis (46%). Al considerar la compra de una impresora doméstica, el 46% de los encuestados se muestran preocupados por los costes de funcionamiento de la impresora, por lo que es más probable que prefieran opciones que sean fiables (43%) y fáciles de mantener (42%).
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