Las impresoras asignadas a un solo empleado pueden generalizarse

Con el trabajo remoto listo para aumentar a medida que las oficinas se reabran, los responsables de la toma de decisiones de TI están poniendo en marcha medidas para apoyar la productividad y garantizar la seguridad en una fuerza de trabajo distribuida. Estos incluyen la reevaluación de la implementación de equipos multifuncionales, el soporte de plataformas basadas en la nube y la protección de los flujos de trabajo digitales y de impresión.

Quocirca señala que el 83% de los encuestados que indican que más de una cuarta parte de los empleados trabajarán de forma remota una vez que las oficinas reabran. Para apoyar el modelo de trabajo híbrido, muchas empresas optan por cambiar el diseño de su flota de impresión para cumplir con los requisitos de distanciamiento social, mientras que otros han proporcionado impresoras aprobadas para trabajadores remotos. Tales elecciones derivan de si las empresas creen que los trabajadores regresarán al trabajo, o si creen que tendrán sus empleados trabajando desde casa.

Con las oficinas operando a menor capacidad, incluso si las personas imprimen más para ponerse al día con el trabajo, el impacto general en los volúmenes haría que regresen a niveles iguales o más bajos que antes de la pandemia. La necesidad de una plataforma que pueda escalar más fácilmente para satisfacer las necesidades de un lugar de trabajo híbrido y proporcionar los niveles de disponibilidad requeridos para dicha fuerza de trabajo es cada vez más evidente, y el 49% de los encuestados afirma que ya ha implementado la nube para la gestión de impresión, y otro 36% planea hacerlo.

Las preocupaciones están aumentando en torno a la impresión casera. En general, el 83% de los encuestados afirma que sus departamentos de TI están muy o algo preocupados por la seguridad de la información que se imprime en los dispositivos domésticos, algo que se evitaría entregando dispositivos aprobados a los empleados o implementado una gestión de derechos digitales en un intento por asegurar los dispositivos de impresión en el hogar.

Las impresoras dedicadas asignadas a un solo empleado pueden volverse más comunes, a medida que continúan las revisiones de las implementaciones de flotas de impresoras existentes, particularmente en torno a la sustitución de las impresoras A3 centralizadas por un modelo distribuido A4. Muchas ya han implementado la impresión sin contacto.

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