La capacidad de trabajo de una impresora como elemento clave
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Como señala HP, se trata de un factor determinante del rendimiento y la productividad que nos puede proporcionar un dispositivo de impresión. Lo ideal es comprar impresoras que cubran en su franja de impresión mensual óptima nuestras necesidades de trabajo, y no dejarnos llevar por el nivel máximo de impresión.
La capacidad de trabajo es uno de los pilares que siempre debemos tener en cuenta antes de valorar la compra de una nueva impresora. Se entiende por capacidad de trabajo la cantidad de páginas que una impresora puede imprimir en un mes, es decir, el nivel o carga de impresión mensual para la que ha sido expresamente diseñada y construida. Es una idea sencilla, pero debemos tener en cuenta que actualmente existen dos indicadores distintos de la capacidad de impresión, el nivel óptimo o recomendado y el nivel máximo.
Cuando hablamos de nivel óptimo de impresión mensual nos referimos al máximo de impresiones que el fabricante recomienda para sacar el mejor partido a la impresora. Normalmente suele ser una franja bastante amplia que en las soluciones avanzadas, como PageWide de HP, cubre sin problemas las necesidades de pequeñas y grandes empresas.
Por nivel máximo de impresión mensual se entiende el tope que puede alcanzar una impresora. Suele ser muy elevado incluso en las impresoras más modestas, pero sólo debemos interpretarlo como un indicador de que en situaciones excepcionales la impresora puede dar un plus de rendimiento si lo necesitamos.
Si nos movemos en ese volumen óptimo de impresión y no nos dejamos llevar por el nivel máximo de impresión, estaremos haciendo el mejor uso posible de la impresora, y eso tendrá efectos beneficiosos en la vida útil de la misma.
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